Rocco Pugliese

Rocco Pugliese era un joven militante del Partido Comunista de Italia (véanse su retrato y foto), de la región italiana de Calabria, asesinado en 1930 por los carceleros fascistas en la penitenciaría de la isla de Santo Stefano, en el archipiélago de las islas Pontinas, en donde había sido deportado a consecuencia de la condena pronunciada en 1928 por el "tribunal" especial fascista.
Rocco nació el 27 gennaio 1903 en Palmi, en la provincia de Reggio Calabria, hijo de Giuseppe Pugliese y Maria Polimeni, y desde su más tierna edad había militado en el Partido Socialista, siendo después entre los fundadores en 1921 de la célula de Palmi del Partido Comunista de Italia, llegando a ser el secretario de esa a la edad de dieciocho años.
Rocco tuve una formación política revolucionaria decisiva durante su servicio militar obligatorio, que cumplió en Turín, una ciudad obrera, donde el movimiento revolucionario era muy fuerte y activa. El período del servicio militar fue una verdadera escuela de cuadros, y el joven que regresó a Palmi después del licenciamiento era un ejecutivo comunista maduro y consciente
(Pugliese L.).
En 1925, el año de los hechos que lo llevaron a volver una victima de los asesinos fascistas, Rocco tenía 22 años de edad era un estudiante de contabilidad. En el pueblo, Rocco también era conocido con los apodos de "Chiacchiarella" ("hablador") y "Mussuni" ("cara grande").
(Bongiorno)

Las premisas de los hechos de Palmi
Palmi, pequeña ciudad de la región Calabria, en la Italia meridional, en la época de los acontecimientos tenía cerca de 15.000 habitantes (hoy cuenta 19.000), y era una plaza fuerte roja, centro de una intensa actividad política socialista y más adelante comunista, en un territorio con grandes propiedades (principalmente citrícolas y oleícolas) con una fuerte explotación de mano de obra de los jornaleros. (Pugliese L.) La célula del Partido Socialista de Palmi fue fundada poco después del devastador terremoto de Messina y Reggio Calabria de 28 de diciembre de 1908, que causó víctimas y daños en la ciudad. El Círculo Juvenil del Partido Socialista tenía 80 miembros, y 78 de ellos votaron en 1921 por la moción comunista. (Bongiorno)
Una de las batallas más importantes del movimiento revolucionario en Palmi fue aquella. victoriosa, contra la absurda renta impuesta por el municipio de Palmi a los ciudadanos que habitaban las casuchas construidas para las sin techo después del sismo, y permanecidas en uso durante veinte años, hasta 1928.
(Pugliese L.)
El 27 de junio de 1924 para protestar por el asesinato del diputado socialista Giacomo Matteotti, la Confederación General del Trabajo proclamó una huelga simbólica de diez minutos, que el Partido Comunista invitó a prolongar a lo largo de la jornada, como ocurrió en Palmi
(Bongiorno), donde quedó memorable la marcha, cuando desfilaron cinco mil antifascistas llegando luego al cementerio del pueblo para depositar ofrendas y coronas florales (Spezzano, 1975).
La fuerte presencia antifascista en Palmi la puso como blanco de violentos asaltos de las pandillas fascistas, particularmente numerosas, puesto que los fasces de combate (las secciones del partido fascista) de Palmi fueron entre los primeros fundados en la provincia de Reggio Calabria.
El 4 de noviembre de 1920, segundo aniversario de la victoria en la Primera Guerra Mundial, un grupo de fascistas, que incluía a dos mafiosos, contratados por los fascistas para oponerse a la izquierda, uno de los cuales era el convicto Santo Scidone, atacó la Cámara de Labor de Palmi, arrasándola.
(Bongiorno)
En las elecciones del 6 de abril de 1924, los comunistas presentaron en el colegio de Palmi a uno de sus candidatos, el abogado Diomede Marvasi. Dos noches antes de las elecciones los comunistas estaban colocando sus carteles electorales cuando fueron acosados por un equipo de la mafia encabezado por Scidone, y Rocco Pugliese se les acercó con una pistola en la mano, comenzó a hablar con los atacantes y los convenció de que desistieran de la provocación.
(Bongiorno)
Marvasi estuvo muy cerca de ser electo: obtuvo 929 votos, faltando el quórum por un breve retraso, en cambio resultó electo Fausto Gullo.
(Bongiorno) La célula del partido contaba trescientos inscritos, con cientos y ochenta inscritos del círculo juvenil, en mayor parte campesinos y jornaleros, además de profesionales y estudiantes.
La fuerza del movimiento antifascista en Palmi se manifestaba en una continua oposición a la expansión del emergente régimen, como cuando al mandamás fascista Michele Bianchi le impidieron dar un discurso en Palmi, provocando un cortocircuito en la red eléctrica y empujándolo primero a detenerse fuera de la ciudad y luego a renunciar a la manifestación por razones de seguridad.
(Pugliese L., Bongiorno)
En 1923 el líder de las escuadras fascistas, Roberto Farinacci, llegó a Palmi para defender en la Corte de lo Penal a los fascistas acusados por un enfrentamiento que tuvo lugar en Maropati, un pueblo a 35 km de Palmi, donde los fascistas habían matado al hermano del alcalde mientras un rico financiero de las escuadras había sido asesinado.
(Bongiorno)
Con motivo del Día del Trabajo del 1 de mayo de 1925, en la noche del 29 al 30 de abril, para impedir las celebraciones, diez líderes antifascistas fueron arrestados con pretextos, entre ellos Giuseppe Florio y los hermanos Antonino y Giuseppe Bongiorno. Estos últimos lanzaron gritos convencionales en la calle mientras la policía los detenía, y así Rocco Pugliese y Giuseppe Marafioti, que vivían cerca de ellos, lograron escapar.
(Bongiorno)
La reacción fue una huelga general, celebrada el 2 y 3 de mayo, con manifestaciones en la calle que tuvieron una tan grande asistencia, que las autoridades no se atrevieron a contrarrestarlos. Los fascistas planeaban perturbar la protesta atacando la sección comunista, pero los comunistas palmeses, encabezados por Rocco Pugliese, se lo impidieron arrasando la sede local del partido fascista, destruyendo los carteles que insultaban a los huelguistas y abofeteando a los fascistas y obligándolos a mantenerse fuera de la ciudad.
(Bongiorno, Pugliese L.)

El 20 de julio se celebró en Palmi la fiesta de San Elías Profeta, con excursiónes campestres tradicionales y cantos y bailes en la montaña del mismo nombre. Los jóvenes comunistas de la ciudad se reunieron para cantar himnos socialistas, pero fueron blanco de la agresión del fascista Francesco Saffioti, quien disparó un tiro de fusil contra el grupo, sin alcanzar a nadie. Perseguido por el bosque, Saffioti logró escapar, pero esa misma noche la policía arrestó a trece comunistas por intento de asesinato, en la persona del mismo Saffioti. Tras trece días de prisión, los detenidos fueron liberados, sin siquiera ser interrogados, gracias a los numerosos testimonios que los despejaron. (Bongiorno).
El 15 de agosto del mismo año una pandilla de fascistas de las aldeas vecinas acampó en la noche a las puertas del pueblo, cerca del Instituto Agrícola, para atacar e incendiar las chozas de los líderes de los partidos de izquierda de Palmi, pero fueron puestos en fuga por un centenar de hombres, encabezados por Rocco y Giuseppe Pugliese y Antonino Bongiorno, que irrumpieron en el campo fascista. Rocco ordenó al líder de los fascistas que abandonaran Palmi de inmediato, de lo contrario, habrían sido atacados y los fascistas obedecieron.
(Bongiorno)
La base que provocó los acontecimientos del 30 de agosto 1925 fueron las repetidas humillaciones sufridas por los fascistas en Palmi, tanto más duras ya que fueron padecidas por quien participaba en una ideología basada en la arrogancia y en el superhombrismo, mientras que en muchas otras partes de Italia las pandillas fascistas dominaban sin oposición.

Los acontecimientos de la Varia
El 27 agosto de 1925 en la ciudad comenzaron las celebraciones religiosas de la Virgen de la carta, con la fiesta tradicional de la Varia, un gran carro votivo que simboliza la Asunción, arrastrado en procesión en las calles de la ciudad por 200-300 fieles (los "mbuttaturi"), con el acompañamiento de la banda (desde 2013 la fiesta, junto con otras tres manifestaciones italianas similares está inscrita en el Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, véase enlace). En 1925 los fascistas impusieron que durante la fiesta la banda de Frigento, una de las dos implicadas en la fiesta, tocara su himno "Giovinezza", (que significa "juventud"), y el presidente (fascista) del comité para las celebraciones, apoyó este abuso.
Los fascistas entonces ententaron imponer que se tocara su himno también durante la procesión, en vez del tradicional pasacalle compuesto por Rosario Jonata, y la gente de Palmi se rebeló a este prepotencia, requiriendo la restitución de las contribuciones dadas y boicoteando el transporte de la Varia, considerando también que los portadores por tradición eran carreteros y marineros, en mayor parte comunistas y socialistas.
Los militantes de izquierda, en primer lugar Rocco Pugliese, emprendieron un trabajo capilar de persuasión para empujar a los cargadores a boicotear el transporte.
(Bongiorno) En efecto apenas cinco marineros y cinco carreteros se ofrecieron para el transporte del carro, y aun los curas boicotearon a la procesión, que se había transformado en un desfile político fascista: de hecho apenas uno de ellos participó en la procesión. Los fascistas se vieron obligados a improvisarse porteadores para llevar a cabo la procesión. (Bongiorno)
Las provocaciones de las cuadrillas fascistas continuaron, incluso con insultos y amenazas a militantes de izquierda en las calles de Palmi, y la tensión alcanzó su máximo a la medianoche del 30 agosto, mientras que la población de la ciudad se reunía en la plaza principal, piazza Vittorio Emanuele, hoy piazza 1° maggio, para asistir a los fuegos artificiales. Antonino Bongiorno, Rocco Pugliese y Giuseppe Marafioti también iban a ver el lanzamiento de globos en alabanza a la revolución soviética, que habían hecho preparar.
(Bongiorno)
Los fascistas irrumpieron entre las mesas de la cafetería De Rosa, que se hallaba al lado de la sede del Partido Fascista, pero que estaba como de costumbre ocupado por comunistas y socialistas, insultándolos y comenzando a cantar una vez más "Giovinezza". Rocco Pugliese intimó que pararan la provocación, empezando comenzar a cantar el himno comunista "Bandiera Rossa" (bandera roja), pero fue atacado por el fascista Rocco Gerocarni con un palo y reaccionó lanzandole una silla. Durante la riña se dispararon unas balas, y quedaron heridos dos fascistas: Rocco Gerocarni, que murió el día siguiente, y Rosario Privitera, además de dos traseúntes (ver la noticia en el diario del Partido Comunista "l'Unità" del 2 septiembre 1925 y la version ficticia de la agencia de información oficial Stefani, publicada por el diario de Turín "La Stampa" del 1
ro septiembre 1925).
Según el escritor Leonida Repaci (véase abajo), que fue testigo de los hechos, el objetivo real de los disparos era él mismo, quien habría sido alcanzado de refilón por dos balas, mientras que la tercero mató a Gerocarni. Los balas se dispararon de arriba hacia abajo desde la terraza de la familia Sambiase, frente a la cafetería, por los mismos fascistas, que por error golpearon a su camarada Gerocarni. El móvil de la emboscada se debe ver en el marco de la repentina explosión de violencia por parte de la ala extremista del fascismo, liderada por el jefe de los matones fascistas Farinacci, con el fin de salir del punto muerto en el que Mussolini había caído después del asesinato de Matteotti y de las consiguientes reacciones de los antifascistas. El objetivo del asalto de Palmi era de todos modos una ciudad con sólidos principios antifascistas, que por lo tanto fue castigada por su niega a someterse a la violencia de los gamberros fascistas.
La reacción del recién nacido régimen fascista fue muy dura: comenzó una verdadera cacería y el comisario de policía Francesco Cavalieri arrestó a muchos antifascistas de la zona, acusándolos de organizar una conspiración subversiva; el mismo Cavalieri admitió más adelante, durante el proceso, que las detenciones eran debidas a razones políticas en vez que al homicidio (ver "l'Unità" del 8 septiembre 1925).
Farinacci envió un telegrama que estimulaba a la venganza las cuadrillas fascistas ("Les puedo asegurar que la sangre fascista derramada estos días será vengada a su debido tiempo")
(Bongiorno) , que el 15 de septiembre devastaron el círculo "Unione e Progresso" y la casa del obrero comunista Managò, que entonces fue arrestado por la policía. Los fascistas asaltaron también la casa del hermano de Leonida Repaci donde robaron objetos y dinero, y intentaron irrumpir en la cárcel de Palmi, para linchar a los antifascistas arrestados por los acontecimientos de la Varia. Según Antonino Bongiorno y Leonida Repaci, un preso vinculado a la mafia, un tal Giovanni Campanella, supuestamente frustró el asalto fascista, quizás por un deseo de redención personal, disuadiendo a los fascistas, también gracias a las grandes cantidades de armas escondidas en la prisión. (Bongiorno)
El periodista Giuseppe Dato, corresponsal del diario "Gazzetta di Messina e delle Calabrie", mismo siendo un fascista también, fue atacado y echado en una tina llena de agua, porque había criticado en una correspondencia las violencia de las cuadrillas fascistas
Los fascistas en los días siguientes impidieron de hecho el ingreso a todos los que no fueran de su agrado, incluidos los abogados de los presos (ver "l'Unità" del 15 septiembre 1925).

El "proceso"
La muerte de Gerocarni se atribuyó a los comunistas como idea preconcebida, la investigación preliminar fue conducida de una manera extremadamente parcial: muchos testigos que habían dado deposiciones contra los acusados, las retractaron, refiriendo de haber sido amenazados por los fascistas y, en octubre del mismo año, dos de ellos se suicidaron, y uno de ellos dejó un mensaje que explicaba su suicidio con el remordimiento por acusar injustamente a Leonida Repaci, Giuseppe Pugliese y Giuseppe Marazzita, pero la corte no consideró todo esto.
Algunas de las acusaciones formuladas contra los antifascistas fueron grotescas: un testigo, un tal Giuseppe Vizzari, afirmó "haber reconocido a los hermanos Bongiorno, Carbone y Marazzita por las llamas de sus pistolas". Incluso la víctima, Rocco Gerocarni, estaba entre los testigos: a pesar de estar agonizando habría indicado los nombres de cinco tiradores, todos comunistas, incluido Rocco Pugliese. Más tarde resultó que solo asentía con la cabeza cuando se nombraba a uno de ellos, tal vez ayudado por alguien que sostenía su cabeza con la mano.
(Bongiorno)
El 5 de diciembre 1925 Barone Ferrara, el Procurador General ante el Tribunal de Apelación de Catanzaro, pidió enjuiciar a treinta y uno personas por complicidad en homicidio premeditado y en fallido homicidio premeditado. La sección de acusación del Tribunal de Apelación de Catanzaro el 29 marzo 1926 encausó a 15 imputados ante el tribunal penal de Palmi, mientras que los otros fueron descargados con sentencia absolutoria o por falta de pruebas, como en el caso de Leonida Repaci (ver "l'Unità" del 3 abril 1926).
El proceso empiezó el 26 octubre 1926 a las 9:30 ante el Tribunal Penal de Nicastro, donde había sido transferido por legítima sospecha. Con un atropello que anticipaba la futura gestión de la justicia por parte del régimen fascista, tres de los cuatro abogados defensores designados por los imputados comunistas, Francesco Lo Sardo, Fausto Gullo y Ezio Riboldi, todos diputados, fueron apresados y enviados al confinamiento, mientras que Nicola Zupo solo permaneció en la defensa
(Bongiorno); el proceso fue entonces suspendido el 30 de noviembre 1926 porque el Procurador General pidió enjuiciar cuatro testigos que habían retractado sus acusacións.
En el mismo año 1926, a consecuencia del atentado del quinceañero Anteo Zamboni, que había ententado matar a Mussolini, con las leyes excepcionales del 26 noviembre 1926 fue instituido el tribunal especial para la defensa del Estado. El nombre de "tribunal" era completamente injustificado, puesto que éste no era constituido por jueces, sino por activistas del partido fascista, y en particular por cónsules de la MVSN (milicia voluntaria por la seguridad nacional).
El 12 marzo 1928 el Tribunal de Casación declaró con sentencia que el proceso tenía que ser asignado al tribunal especial, ante el cual el 27 noviembre del mismo año empiezó la vista. Los quince imputados antifascistas habían pasado más de tres años en prisión preventiva, y fueran acusados de "homicidio, homicidio intentado, actos tendentes a levantar la guerra civil, insurrección contra los poderes del Estado".
Entre los imputados había Pugliese que ante el tribunal tuve un comportamiento del todo no sometido, coherente con su intransigencia en la lucha antifascista. El fiscal Isgrò definió a los acusados como "el grupo de comunistas que, encabezados por Rocco Pugliese, en la plaza de Palmi, en la noche del 30 de agosto, dispararon"
(Bongiorno) y pidió para Rocco Pugliese la condena a cadena perpetua, para otros ocho imputados la pena propuesta fue de 30 años, mientras que la pena más "leve" pedida fue de 12 años y por apenas un imputado se pidió la absolución de la instancia. La pena de muerte había sido abolida en Italia en 1889 (de facto desde 1877) y fue restaurado por el régimen fascista en 1930.
El 5 diciembre 1928, a las 20:30, apenas ocho días después del principio del proceso, el tribunal (Presidente Antonino Tringali Casanuova, juez relator Presti), pronunció la Sentencia n. 145, que conminaba condenas durísimas: la más pesada, de 24 años y 7 meses, tocó precisamente a Rocco Pugliese, mientras que Natale Borgese y Vincenzo Pugliese fueron condenados a 10 años y 8 meses, Giuseppe Florio y Gregorio Grasso a 10 años y 7 meses, Giuseppe y Antonino Bongiorno a 8 años y 7 meses. Este último fue procesado otra vez por el tribunal especial en 1935, por organización y participación al Partido Comunista, y recibió una sucesiva condena a 12 años.
La sentencia de Rocco fue la más dura dictada por el tribunal especial hasta ese momento, salvo las pronunciadas contra Gino Lucetti y Tito Zaniboni, que habían intentado matar al Duce.
(Bongiorno)
Los otros seis antifascistas fueron absueltos, entre ellos Francesco Carbone, Antonio Sambiase, Giuseppe Pugliese, Pasquale Carella y Giuseppe de Salvo, además del abogado socialista Giuseppe Marazzita, futuro senador de la República, que de todos modos fue repetidamente encarcelado en los restantes años de la dictadura fascista.
También se debe recordar que Fortunato, el hermano mayor de Rocco, nacido el 7 de mayo de 1891, cochero de profesión, casado y con ocho hijos, fue detenido el 30 de noviembre 1926 por haber demostrado solidaridad con Rocco, y fue asignado al confinamiento en Lampedusa y luego a la isla de Ustica. A pesar de la muerte de una hija y aunque sufría de tracoma exudativo, que le hizo casi ciego, se le mantuvo en prisión y se liberarán solo en marzo de 1929.

El caso Repaci
Otro antifascista de Palmi implicado en los acontecimientos de la Varia fue Leonida Rèpaci (1898-1985), escritor y más adelante también pintor, que ideó el Premio Viareggio y abogado él también que, según Francesco Spezzano, senador del Partido Comunista Italiano en el posguerra, era el verdadero objetivo, junto con Rocco Pugliese, de la expedición punitiva de la cuadrilla fascista.
Repaci fue encarcelado pero, según lo mencionado antes, fue absuelto durante la indagatoria y no fue sometido al tribunal especial. Su absolución, junto con aquella de otros acusados, fue atribuida a intervenciónes "excelentes", en el caso de Repaci a la de Arnaldo Mussolini, hermano del "duce", además del colegio de defensa constituido por peces gordos del régimen. En cualquier caso Repaci benefició de numerosos testimonios de personages bien acogidos al régimen fascista. Su hermano mayor Gaetano era además el médico de familia de Mussolini.
Mientras que estaba en la cárcel Rèpaci escribió "In fondo al pozzo" ("en el fondo del pozo"), una novela con muchas referencias autobiográficas, incluso a los acontecimientos de la Varia de 1925.
Sea como sea Repaci, poco más que un mes después de su absolución, dimitió del Partido Comunista con una carta, publicada el 6 mayo 1926 por el diario del Partido "l'Unità", en la cual reivindicaba su propia posición política y colateral a la del Partido Comunista y e anunciaba su propio repliegue en la vida privada. Repaci escribía : "Los últimos hechos dolorosos de Palmi (…) me obligan, por las necesidades de la vida que lamentablemente nos toca vivir todos los días, por ese mínimo de paz que le debo a mi espíritu atribulado y sobre todo por una promesa hecha a mi madre frente a su lecho de dolor, para pedirles total libertad de acción hacia el Partido en cuyas filas ocupé siempre un lugar como solitario y como artista (...) hoy, al dejar sus filas para tomar refugiarme totalmente en mí mismo y atender a mi arte, reciban mis cordiales saludos queridos amigos".
L'Unità contestó la carta de Repaci de una manera muy polémica, con un artículo sin firmar, pero atribuido a Antonio Gramsci, comparando el lavarse las manos de Repaci al sufrimiento de los presos políticos comunistas que no renegaban de sus propias opciones políticas. L'Unità escribía : "¡Ay, no es fácil para un intelectual pequeñoburgués pasar por el fuego de la ideología obrera y la disciplina comunista!" y sobre la carta : "Los obreros la leerán con interés, pero no deben entristecerse más allá del límite marcado por la consideración de un hombre que no tuvo el coraje de seguirlos en el dificilísimo camino de la lucha de clases". Parece que la respuesta enfureció a Repaci, quien amenazó con retar a duelo a Gramsci, quien respondió aceptando el duelo, pero adoptando las papas como arma.
(Bongiorno)
La controversia continuó también en 1944, después de la liberación de Roma, entre "l'Unità" y el diario reaccionario "Il Tempo". En "l'Unità" el editor Celeste Negarville y Lucio Lombardo Radice recordaron a Repaci la forma en que había sido absuelto por el tribunal especial fascista, por intervención del régimen, y Repaci se defendió en "Il Tempo" con insultos violentos, tratando de pasar los ataques a él como ataques a la libertad de prensa.
(Bongiorno)
Pero luego dejó caer la polémica, cuando "l'Unità" publicó una carta de Antonino y Giuseppe Bongiorno che refería muchos hechos que confirmaban las intervenciónes en su favor por parte de los mandarines del régimen.
En este punto, "l'Unità" publicó una carta de Antonino y Giuseppe Bongiorno en la que relataban muchos hechos que confirmaban las intervenciones a su favor de los peces gordos del régimen. Al principio Repaci negó su autenticidad, afirmando que los hermanos Bongiorno no podían haber estado en Roma, y de hecho le parecía que estaban muertos. Sin embargo, cuando los dos hermanos lo visitaron en la sede del diario, Repaci abandonó la polémica y publicó un brevísimo reconocimiento de la visita de los dos Bongiorno.
(Bongiorno)

El asesinato
Rocco Pugliese fue recluido el 19 de enero de 1929 en la penitenciaría de Santo Stefano (véase mi página) que fue utilizada por el régimen fascista para deportar los opositores más peligrosos, con el propósito de doblegar su voluntad con condiciones durísimas de detención. Un tratamiento particularmente duro, con el aislamiento desde los presos comunes, afligía a los presos políticos condenados por el tribunal especial, para evitar que su carisma pudiera influir en ellos. Eran también sometidos a una vigilancia más rigurosa, solecitada a los carceleros con un aviso fijado a las puertas de las celdas, advirtiendo: "preso peligroso que vigilar cuidadosamente".
Rocco fue encerrado en la cuarta sección, la de los "incorregibles" creada a título experimental, y denominada "teratocomium", es decir refugio de monstruos, donde se encarcelaba a los presos políticos más peligrosos para el fascismo.
(Bongiorno)
En Santo Stefano Rocco mantuvo su comportamiento orgulloso ("un ejemplo de resistencia y orgullo", según Vico Faggi), y rehusó someterse a la máquina penitenciaria fascista, que se le hizo pagar cara, al principio con vejaciones y torturas continuas, y por fin con la muerte, que le occurrió el 17 octubre 1930.
Según la versión oficial Rocco Pugliese se suicidó ahorcándose, mientras que otra versión, mal creíble, afirma que murió sofocado mientras que dos carceleros intentaban alimentárlo forzosamente con una sonda, atado a su cama de contención. La alimentación forzada habría sido decidida como resultado de una supuesta huelga de hambre de Rocco.
En realidad varias fuentes atendibles sostienen que Pugliese fue estrangulado o matado a palos por los carceleros: según Francesco Spezzano "después de echarle una manta en la cabeza (...) lo mataron a palos" y más adelante "sus gritos desesperados fueron oídos para rato por sus compañeros de encarcelamiento (...) que, cerrados en sus celdas, no pudieron hacer nada para ayudarle" y luego "la emoción para el bárbaro asesinato fue enorme entre los presos que hicieron una colecta para enviar una corona de flores a su entierro".
El tratamiento antes descrito era llamado por los carceleros el "Sant'Antonio", con un término derivado de la jerga de los camorristas (los mafiosos de Nápoles): consistía en irrumpir de sorpresa en la celda, cubrir a la víctima con una manta, y luego golpearla duramente con patadas, puños, bastonazos o con las gruesas llaves de las celdas. La manta servía para no hacer reconocer los agresores, para sofocar los gritos de las víctimas y para impedirles reaccionar, y también para no dejar en el cuerpo de la víctimas de las palizas unas marcas, que pudieran demostrar la agresión. Según el anarquista ligur Giuseppe Mariani, antes encarcelado en Santo Stefano, en la penitenciaría durante las palizas no se utilizaba la manta, puesto que los carceleros, estando seguros de su impunidad, no creían necesitar cualquier precaución.
El preso comunista Giovanni Pianezza, compañero de celda de Rocco, obtuvo el permiso de velar a los despojos en la cámara mortuoria, declarando ser su primo. En un momento de inatención de los carceleros consiguió levantar la sábana que cubría el cuerpo y vio que la cara era amoratada, como por una muerte para asfixia. Sorprendido por las guardias, lo amenazaron hacerlo morir de la misma manera de Rocco, si hubiera hablado, y entonces lo transfirieron inmediatamente.

El socialista Sandro Pertini, que fue Presidente de la República Italiana desde 1978 hasta 1985, fue recluido en Santo Stefano desde 1929 hasta 1930, muchos años más tarde, en 1947, elegido diputado de la Asamblea Constituyente, recordó en una intervención en aula que "Rocco Pugliese fue liquidado en la penitenciaría de Santo Stefano mientras que yo estaba allí, en la cama de contención".
La intervención de Pertini era una réplica a la respuesta dada por el ministro de justicia Giuseppe Grassi a su interpelación conciernente la paliza por parte de los carceleros de unos prisioneros de la cárcel de Poggioreale en Nápoles, seguida por la muerte de uno de ellos.
Pertini fue muy claro: " ... hablo por experiencia personal (...) . En la cárcel, honorable Ministro, se hace esto: se pega un preso; por los golpes el preso se muere, y entonces todos se preocupan, y no se preocupan sólo los carceleros que pegaron al preso, sino también el director, el médico, el capellán y todos los que forman parte del personal de la cárcel. Y entonces hacen esto: desnudan al preso, lo colgan a la reja y lo hacen descubrir así colgado. Entonces llega el doctor y hace el parte médico de muerte por suicidio. Esta fue la muerte de Bresci. Bresci fue golpeado a muerte, entonces colgaron su cadáver a la reja de su celda de Santo Stefano, donde yo me quedé un año y medio".
Pertini se refería a la muerte de Gaetano Bresci, el anarquista de Prato, cerca de Florencia, condenado a cadena perpetua por el asesinato del rey Humberto I (véase mi página sobre él), pero muerto en 1901, después de pocos meses desde su traslado en Santo Stefano.
Ugoberto Alfassio Grimaldi, citando testimonios de presos políticos, escribe de Bresci: "... ese 22 de mayo los tres guardias le hicieron el " Santantonio ": o sea cubrir a alguien con mantas y sábanas y después apalearlo a muerte; su cadáver había sido enterrado, en un lugar quedado sin huella en los archivos de Santo Stefano, por dos penados enviados adrede allí de otra cárcel, y después enviados inmediatamente atrás; el comandante de la penitenciaría había sido promovido y las tres guardias habían sido recompensados ".
Ugoberto Alfassio Grimaldi, citando testimonios de presos políticos, escribe de Bresci: "... ese 22 de mayo los tres guardias le hicieron el " Santantonio ": o sea cubrir a alguien con mantas y sábanas y después apalearlo a muerte; su cadáver había sido enterrado, en un lugar quedado sin huella en los archivos de Santo Stefano, por dos penados enviados adrede allí de otra cárcel, y después enviados inmediatamente atrás; el comandante de la penitenciaría había sido promovido y los tres presos habían sido recompensados".
El comunista Girolamo Li Causi , luego senador de la República, escribió en su autobiografía : "La noticia de la muerte del propio Pugliese me causó un grandísimo dolor. Nuestro compañero sufriendo por los malos tratos y abusos a los que era sometido, había decidido hacer una huelga de hambre : en un intento de obligarlo a tragar la comida, la guarda solo logró estrangularlo. Fue un gran luchador, lleno de vitalidad y espíritu de sacrificio; otro compañero que se iba".
Todavía Pertini, en un testimonio citado en el libro coordenado por Vico Faggi, cuenta: "Una noche me despertó un grito reprimido: «mamá, mamá!». El día siguiente difundieron la voz que Rocco Pugliese se había ahorcado; sin embargo el suicidio no era nada más que una farsa. Pugliese había sido asesinado por los carceleros.".
En la misma obra se recorda que el asesinato de los presos político en las cárceles fascistas no era un caso aislado, como atestiguan los casos de Gastone Sozzi, en la carcel de Perugia, y de Romolo Tranquilli, el hermano del escritor Ignazio Silone, en la carcel de Procida. La edición clandestina de l'Unità del 1
er enero 1929 publicó los nombres de los presos comunistas muertos o sea como sea enfermos en las cárceles fascistas.
La muerte de Rocco fue inmediatamente percibida como un asesinato y la noticia llegó a los círculos anti-fascistas en Italia y en el exilio. El periódico del Partido Comunista francés "L'Humanité", publicó en 21 de diciembre 1930 un artículo de Gabriel Péri, futuro diputado comunista y futura víctima de los nazis, titulado: "Comment périrent à San Stefano les communistes Castellano et Pugliesi" ("Cómo fallecieronen Santo Stefano los militantes comunistas Castellano y Pugliesi")
(Pugliese L.) que denunciaba la muerte de dos presos comunistas, Castellano y Rocco Pugliese, (denominado erróneamente como "Pugliesi"), y la condición de salud grave del militante comunista Emmanuelli y de Sandro Pertini, enfermo de tuberculosis. El artículo atribuya la muerte de Rocco a una represalia de los guardias por rechazar sus insinuaciones sexuales, gritando más bien por socorro en voz alta. Más tarde Rocco habría sido oprimido proporcionándole comida no comestible, que el joven habría rechazado desatando la segregación y el ayuno en la "cama de contención" y el consiguiente fallecimiento.
El artículo de Péri y la difusión de la noticia por los antifascistas exiliados avergonzó el régimen fascista, y Mussolini instituyó una ridícula comisión de investigación sobre las condiciones de los reclusos en las prisiones, presidida por el Fiscal General Adjunto Claudio Rizzo, quien ya el 19 de enero concluyó su trabajo escribiendo: "a principios de octubre pasado (...), junto con un estado más notable de descomposición orgánica, comenzó a manifestarse en el Sr. Pugliese una verdadera forma de psicopatía, manifestada en excesos violentos y en un delirio de persecución característico, que lo llevó a considerar cualquier alimento envenenado, y por lo tanto a rechazar ingerirlo (...). El 12 de octubre fue hospitalizado en la enfermería, diagnosticándose estrofobia, manía persecutoria, flema apical, TBC y neurosis cardíaca, y, por prescripción médica, tuvo que ser asegurado a la cama de contención y sometido a alimentación artificial ". El 15 de octubre, según el informe, el director de la penitenciaría propuso el traslado de Rocco al manicomio judicial en Nápoles, lo que no pudo ocurrir porque "el preso murió de parálisis cardiaca en la tarde del día 17".
(Bongiorno) La comisión, como era previsible, no dio ningún resultado, a excepción de un alivio momentáneo del brutal tratamiento penitenciario.
La familia de Rocco se enteró de su muerte casi por casualidad y sus restos mortales nunca fueron restituídos.
(Cordova, 1965) La jefatura de policía de Reggio Calabria tomó medidas para evitar que el funeral de Rocco generara manifestaciones contra el régimen y dio instrucciones para que el funeral "no se realice en forma pública y para que el cuerpo sea transportado durante la noche desde la estación de tren de Palmi hasta el cementerio", pero en realidad el cuerpo de Rocco nunca llegó a Palmi y fue probablemente destruida ya en Santo Stefano (Pugliese L.), como probablemente pasó con el cadáver de Gaetano Bresci.

Una obra teatral y seis libros
La compañía teatral Teatridelsud de Palmi puso en escena "L’Arrobbafumu" uno espectáculo de Francesco Suriano, sacado del libro del mismo autor, interpretado por Peppino Mazzotta, que se inspira en los acontecimientos de Palmi para contar la Calabria y su retraso de desarrollo.
El escritor calabrés Domenico Gangemi publicó en 2004 una novela libremente inspirada en los acontecimientos de la Varia de 1925 titulada "'25 nero", editada por Pellegrini Editore. Además Natale Pace, teniente de alcalde y ex vicealcalde moderado de Palmi, en su ensayo "Il debito" (" La Deuda"), publicado en 2006 por LaRuffa Editore, narra las vicisitudes de Rocco desde el punto de vista de Leonida Repaci, quien fue un amigo cercano del autor.
En 2008 Giuseppe (Pino) Bongiorno, hijo de Antonino, publicó el libro "Una vita da comunista" ("Una vida de comunista" para la editorial L'Albatros de Roma, dedicado a la vida de su padre, que da amplio espacio a los acontecimientos de la Varia de 1925 y al juicio de su padre, de Rocco y de todos los demás acusados.
En 2015 el editor Annales de Roma publicó "Rocco Pugliese: un Comunista di Calabria" un buen libro de Lorenzo Pugliese, un pariente de Rocco, que relata con pasión y dedicación el resultado de una investigación de 18 años, realizada por el autor a través de archivos, revistas, bibliotecas y relatos de testigos. Este libro enteramente cumple el deseo de Sandro Pertini, expresado a la sobrina de Rocco, para que el sacrificio de este joven de Palmi nunca fuese olvidado.
En 2017, el periodista Pier Vittorio Buffa publicó por Nutrimenti de Roma el libro "Non volevo morire così" ("No quería morir así"), que cuenta las historias de los prisioneros de Santo Stefano y los confinados de Ventotene, recopilados en gran parte de sus expedientes conservados en los archivos, incluidos los de Santo Stefano. Un capítulo está dedicado a Rocco Pugliese.
La ciudad de Palmi nombró una calle en honor a Rocco Pugliese y el 25 de abril de 2018 colocó una placa en viale Rimembranze, 20, en el lugar donde se encontraba su casa nativa :

Para eterna memoria, aquí se hallaba el hogar nativo de
Rocco Pugliese 1903-1930
Comunista palmés que junto con otros jóvenes antifascistas estableció la sección del Partido Comunista de Italia en Palmi.
Condenado inocente por el Tribunal Especial por los "hechos de la Varia" del 30 de agosto de 1925, asesinado por la brutalidad fascista en la Penitenciaría de Santo Stefano.
Sandro Pertini
Palmi 25 de abril de 2018

Rocco Pugliese hoy
A pesar de la segregación, del asesinato y de la ocultación de su cadáver, aunque más de noventa años pasaron desde su muerte y tal vez nadie de los que conocían Rocco todavía está vivo, ese joven de Calabria de 27 años sigue viviendo en la memoria, su sacrificio todavía despierta gratitud y su brutal asesinato aún inspira horror y indignación.

gracias a Stefania Marino y a Lorenzo y Giuseppe Pugliese por las preciosas informaciones

Me disculpo por cualquier error en la traducción española:
si deseas comunicar conmígo para correcciones y/o comentarios,
escríbeme

BIBLIOGRAFIA:
- ALFASSIO GRIMALDI Ugoberto (1970) Il re "buono". Feltrinelli, Milano. pág. 468-470.
- AJELLO Nello (2003) Il confino. Ecco le vacanze che offriva il duce. La Repubblica, 13 settembre 2003, pág. 39.
- AMENDOLA Eva Paola (2006) Storia fotografica del Partito Comunista Italiano. Editori Riuniti, Roma.
- BONGIORNO Pino (2008) Una vita da comunista. Biografia di Antonino Bongiorno. L'Albatros, Roma.
- BUFFA Pier Vittorio (2017) No volevo morire così. Nutrimenti, Roma. Pág. 87-94.
- CORDOVA Ferdinando (1965) Il processo Gerocarni. Historica, 16 (18): 196-212.
- CORDOVA Ferdinando (1977) Alle origini del PCI in Calabria - 1918-1926. Bulzoni, Roma.
- CORDOVA Ferdinando (1994) Un originale documento sui fatti di Palmi dell'estate del 1925, Historica, XLVII-4, pág. 157-167.
- DA PASSANO Mario Il «delitto di Regina Cœli» (
enlace)
- DAL PONT Adriano (1975) I lager di Mussolini. La Pietra, Milano.
- DAL PONT Adriano, LEONETTI Alfonso, MAIELLO Pasquale, ZOCCHI Lino (1962) Aula 4: tutti i processi del Tribunale speciale fascista. ANPPIA, Roma.
- FAGGI Vico (a cura di) (1970) Sandro Pertini: sei condanne due evasioni. Mondadori, Milano.
- GALZERANO Giuseppe (1988) Gaetano Bresci: la vita, l' attentato, il processo e la morte del regicida anarchico. Galzerano editore - Atti e memorie del popolo - Casalvelino Scalo (Salerno). tel. y fax: +39.0974.62028
http://galzeranoeditore.blogspot.it/ e-mail: giuseppe.galzerano@tiscalinet.it
- GANGEMI Domenico (2004) '25 nero. Luigi Pellegrini Editore, Cosenza.
- GHINI Celso, DAL PONT Adriano (1971) Antifascisti al confino 1926-1943. Editori Riuniti, Roma.
- LI CAUSI Girolamo (1974) Il lungo cammino : autobiografia 1906-1944. Editori Riuniti, Roma. pág. 151-152.
- LISA Athos (1973) Memorie. In carcere con Gramsci. Feltrinelli, Milano.
- MARIANI Giuseppe (1954) Nel mondo degli ergastoli, S.n., Torino.
- PACE Natale (2006) Il debito. Leonida Repaci nella storia. Laruffa Editore, Reggio Calabria.
- PERTINI Sandro (1947) en "Atti dell’Assemblea Costituente. Discussioni", IX, 19 noviembre 1947, pág. 2179-2180.
- PUGLIESE Amelia (s.a.) Viaggio nella casa di correzione penale di Santo Stefano. (
enlace)
- PUGLIESE Lorenzo (2015) Rocco Pugliese: un Comunista di Calabria). Annales, Roma (
enlace).
- SPEZZANO Francesco (1968) La lotta politica in Calabria: (1861-1925). Lacaita, Manduria.
- SPEZZANO Francesco (1975) Fascismo e antifascismo in Calabria. Lacaita, Manduria.
- SPEZZANO Francesco (1984) Voz "Pugliese, Rocco" en "Enciclopedia dell’antifascismo e della Resistenza". La Pietra-Walk Over, Milano. IV: pág. 813-814.
- SPRIANO Paolo (1969) Storia del Partito Comunista Italiano. Einaudi, Torino.

SITIOS CONSULTADOS (accessibles al 29 de octubre de 2022):
http://www.ecn.org/filiarmonici/santostefano.html
https://es.wikipedia.org/wiki/Palmi
https://it.wikipedia.org/wiki/Leonida_Repaci
http://www.terreprotette.it/tp2/106
http://www.ventotene.it/escursioni.aspx
https://circoloarmino.files.wordpress.com/2014/04/antifascisti-nati-o-residenti-a-palmi.pdf

no más accessibles al 29 de octubre de 2022:
http://www.anpi.it/ts/1928_4trim.htm
http://www.variadipalmi.it/curiosita.asp?modulo=leggi&ID=6
http://spazioinwind.libero.it/nb/vittoriofoa/tribunale.htm
http://www.teatrodellacquario.com/stagioni/2007/schede/arrobbafumo.htm
http://www.variadipalmi.it/
http://www.marcellobotarelli.it/santostefano/index.htm
http://www.istoreco-re.it/isto/default.asp?id=326&lang=ITA
http://www.domenicogangemi.it/
http://www.traveleurope.it/ventoten.htm

Me disculpo por cualquier error en la traducción española:
si deseas comunicar conmígo para correcciones y/o comentarios,
escríbeme

página creada el: 1° marzo 2009 y puesta al día el: 22 noviembre 2022